Las lámparas UV producen una radiación con una longitud de onda de 254 nm. El ADN que se encuentra en las células de todas las bacterias y virus presenta un máximo de absorción cercano a esta longitud de onda, por lo que al irradiar el ADN con luz UV tiene lugar una reacción foto química que lo desactiva. De esta forma queda paralizado el metabolismo de los gérmenes impidiendo la posibilidad de alimentarse y reproducirse, con lo cual se transforman en inocuos.
Este proceso remueve toda forma de vida en el agua por su gran eficacia virucida y germicida: 99,99 % de bacterias, virus, hongos y esporas (formas resistentes de bacterias, muy difíciles de eliminar). Los equipos de radiación UV resultan muy efectivos para la desinfección del agua, tanto de red como para potabilizar.
Ventajas de los rayos ultravioleta:
- No deja residuo en el agua tratada.
- Las sales nutrientes no son eliminadas.
- Los compuestos nitrogenados no alteran su capacidad de desinfección.
- La sobre dosificación no produce efectos perjudiciales.
- Necesita tiempos de contacto muy cortos.
- Seguro, opera sin productos químicos.
- Bajos costes de inversión y mantenimiento.
- Fácil instalación por módulos.
- Diseños compactos.
